Reescribir
la Historia del Arte y llamarla Historia de la Artesania. Añadir que
desde la Revolucion Burguesa y la aparición del capitalismo de
mercado, aparecen dos prácticas diferenciales: el Arte y el Diseño
Industrial. Hacer constar que en la nueva era del salario y del
precio/hora, las actividades como la agricultura y la artesania
pierden poco a poco su rentabilidad y su capacidad de excelencia
urgidas por la productividad de la máquina.
“Es
posible que el término “artesanía” sugiera un modo de vida que
languideció con el advenimiento de la sociedad industrial, pero eso
es engañoso. “Artesanía” designa un impulso humano duradero y
básico, el deseo de realizar bien una tarea, sin más.”i
Predecir
que ese impulso redefinirá una manera transversal de entender la
creatividad aplicada a la formalización de imágenes y objetos que
nos mejoren la vida.
La
materialidad será cada vez más el contrapeso gozoso de la
virtualidad de nuestras TIC’s, de los productos de uso rápido y
obsolescencia urgente, de nuestros entornos cambiantes. Entenderemos
esas ventajas, pero buscaremos una vida mas plena en experiencias
comunicativas y sensoriales que nos hagan de toma a tierra, donde el
peso y el tacto definan nuestra consciencia de estar vivos.
¿Utopia?
No, el planeta y su clima se haran cada vez mas presentes, mas
urgentes. Y redefiniremos nuestras vidas en un carpe
diem que buscará el sentido en la
autenticidad y el compromiso.
El
capitalismo financiero con su sociedad líquida (cuando no
directamente gaseosa) está llamado a ser superado en un mundo que ya
no puede prescindir de la globalidad de la cultura y su comunicación
en tiempo real, pero que dará a la materialidad su justa medida para
hacernos responsables de lo que pasa. Y perderemos mobilidad física
(las materias, las personas) y ganaremos en raices y tiempo.
Diseñaremos servicios y valoraremos la apropiación de las cosas con
un sentido ético y cooperativo.
Producir
localmente con respeto a las materias primas próximas, mirar a los
ojos cada vez que nos lanzamos a producir un nuevo útil, una nueva
experiencia, entender las preguntas de nuestros congeneres, sus
necesidades, y responder generosamente con objetos amables,
funcionales, reparables, durables. Y volveremos a dejar en herencia
aquellos objetos que nos hicieron crecer, de la misma manera que
estaremos orgullosos de dejar en herencia una tierra reequilibrada.
Este
es el programa de la artesania, del buen diseño, del buen arte. Por
eso rescatar, mirar, hacer visibles las prácticas de la excelencia
artesana, señalar su singularidad plural, ilusionar al espectador
con el goce de su experiencia, conectar al hacedor con el usuario,
nos resulta un trabajo inexcusable.
Y
ello da como resultado no sólo una exposición (que lo es) sino una
ocasión para disfrutar, enamorarse, y también preguntarse por
nuestra responsabilidad para cooperar con un mundo respetuoso, con un
mundo del que nos sintamos orgullosos.
“El
artesano representa la condición específicamente humana del
compromiso.”
Jesús-Angel
Prieto, La Floresta marzo del 2010.
i
Richard Sennett El artesano Ed. Anagrama, Barcelona-2009.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada